- Autor del texto – Antonio Cuadra
- Autor de fotos – Keeway/AC
- Autor acción – Santi Roig
- Fecha – 25/10/2018
A partir de ahora, la familia RK de Keeway cuenta con un modelo “insignia”, la RKF, una naked deportiva capaz de competir de tú a tú con los modelos más potentes y tecnológicos del mercado, con mismos argumentos, una estética musculosa de lo más agresiva y un precio muy asequible: 2.799 €.
Fue presentada en el pasado salón EICMA de Milán y ya está disponible en nuestro mercado a través de los concesionarios Keeway-Benelli. La Keeway RKF no defraudará ni por su agresiva estética ni por las prestaciones que desarrolla su nuevo motor 4v refrigerado por agua, ni por equipamiento, ni mucho menos por el precio.
Es un vuelco total de lo que conocíamos hasta ahora en los modelos de asfalto de Keeway con las iniciales RK ya que no comparte con ellos absolutamente nada y ha salido tan bien dotada que ni siquiera le hace sombre su prima hermana la Benelli BN 125 que también probamos bajo una intensa lluvia en el circuito de Osona (Vic, Barcelona). Es más, su hermana la deportiva RKR que acaba de salir al mercado, está menos dotada que la RKF (horquilla no invertida, por ejemplo).
La base ciclo de la RKF es un bastidor doble viga en acero. Representa las tendencias clásicas de las naked de media cilindrada japonesas, frente a los bastidores multitubulares (Benelli BN 125) de la escuela italiana. Sobre esta base se viste la RKF con una carrocería de formas muy musculosas y agresivas. A pesar del volumen y cuerpo que imponen esas líneas, el depósito de la RKF tan sólo da cabida a 10 litros de combustible cuando lo habitual es que ronden los 15 litros o incluso 20. Este elemento se prolonga hacia delante y abajo con dos aletines que canalizan el aire de marcha hacia un gran radiador, y siguen hacia abajo casi tocando la quilla que cubre los bajos del motor y el tubo de escape. Sobran las tapas negras que se encuentran justo detrás de los aletines y debajo del depósito y que tapan por completo el motor: ¡si precisamente hay que dejarlo a la vista y presumir de que se trata de un “Liquid Cooled”!
Su faro está parcialmente cubierto por una moldura que simula ser doble óptica con el ceño fruncido para aumentar esa imagen agresiva. Nos recuerda un poco al de la última Duke. Los contornos laterales del faro se envuelven con una guía luminosa que se hace ver con luz de día.
Por encima del faro se encuentra el cuadro de instrumentos por pantalla LCD panorámica con mucha información. No hay botones para manejar las distintas funciones: todo se controla con el pulgar derecho desde el botón que incluye el soporte de la bomba de freno, pudiendo consultar sobre la marcha sin peligro.
La parte posterior de la RKF es de lo más minimalista con el asiento del pasajero sobreelevado. El soporte de la matrícula se reduce a la mínima expresión y soporta también los intermitentes. Detalle muy actual es el guardabarros trasero asimétrico pegado a la rueda y anclado al extremo derecho del basculante. Para presumir (pocas 125 lo hacen) el monoamortiguador trasero cuenta con bieletas en su fijación inferior para conseguir un funcionamiento progresivo.
Delante, la horquilla es invertida y de eje centrado, como en la BN 125. También comparte con la marca italiana las mismas llantas negras de seis palos “bífidos” con neumáticos Cordial en misma medida así como los discos de 260 y 240 mm combinados entre sí (CBS) aunque empleando en el disco posterior una pinza de doble pistón en lugar de la de simple.
Mención especial al motor. Los bajos tienen muchos puntos en común con la BN 125 (mismos cárteres, cigüeñal y eje de equilibrado) encerrando un cambio de seis velocidades en lugar del tradicional de cinco con la bomba de agua por el lado derecho justo debajo de la tapa del cartucho del filtro de aceite. El cilindro y culata van refrigerados por agua con una arquitectura similar a la de la BN 125: 4 válvulas, simple árbol de levas (SOHC) y doble bujía para conseguir una combustión completa. Armand López, técnico de Keeway, nos comentó en la presentación que se podían haber apurado los 15 CV límite pero se han conformado con los 13 CV a 9.500 rpm para ganar en elasticidad, consumos y facilidad de manejo.
Primeras sensaciones
Como ya comentamos con ocasión de la BN 125, la lluvia torrencial que sufrimos en la presentación no es lo mejor para sacar conclusiones de una motos y menos con neumáticos Cordial que te obligan a conducir con suma cautela, aunque en ningún caso nos dieron un respingo.
Sí que te podemos adelantar que la RKF tiene cuerpo de moto grande aunque la posición de conducción que ofrece es bajita (también a 770 mm del suelo como la BN 125) conseguida a costa de ir un tanto envuelto entre el asiento trasero y el depósito. En cualquier caso es cómoda y estrecha para poder apoyar las dos plantas de los pies al suelo, con un depósito que adelgaza sus formas justo en la zona donde se apoyan las rodillas. En esta situación se agradece que las estriberas del piloto cuenten con una goma interior extraíble que deja al descubierto un dentado para que el calzado no resbale.
Todo lo dicho sobre los frenos en la BN 125 es transferible a la RKF: muy buena su dosificación y la escasa contribución CBS al freno delantero. Lógicamente preferimos no hablar de potencia de frenado, pero es previsible encontrarse con un plus trasero al equipar una pinza de doble pistón que muerde al disco de 240 mm con más fuerza que la de pistón sencillo.
Su motor es extraordinariamente suave y sin nada de vibraciones en regímenes bajos y medios (no lo podíamos estirar). Está mucho más “lleno” el de la BN porque empieza a empujar casi desde ralentí, pero no lo hace mal el de la RKF: en situaciones de “mucho tacto” hay que tirar un poquito más de embrague.
El precio es la tercera B y casi más importante de la RKF: barata y con una relación precio/calidad excelente (una naked “acuosa” no baja tanto de la barrera de los 3.000 €). Además estás a tiempo de acogerte a dos promociones: seguro gratuito para más de 25 años (menores con suplemento) hasta final de año, y si te das prisa, gastos de matriculación gratuita hasta el 31 de octubre. Sólo te queda decidirte entre la RKF de color blanco que ilustran las fotos o la de color negro.
Primer vistazo
Haz click sobre la imagen para ampliar
Ficha técnica/ Equipamiento/ Precio/ Galería Imágenes
|