• Autor del texto – JM Peña/Ricardo Gómez/Antonio Cuadra
  • Autor de fotos – Equipo Aventura Keeway TX 125
  • Fecha – 08/10/2012

José María Peña es un experto en raids africanos y lo hace tanto en moto como en quad. Y cuando no tiene un rally donde correr, forma un equipo con compañeros de Logroño y te organiza una aventura con motos o scooters de estricta serie. En esta última aventura pone a prueba cinco trails Keeway TX 125 a tope en África, con la recompensa final de las dunas de Merzouga.


Aventura Keeway TX 125 Para el que no le conozca, José María Peña es un aventurero nato. Su curriculum es de lo más extenso y, para no extendernos, te diremos que en el 2003 fue Campeón de España de Resistencia Quad haciendo equipo con Julián Polo, en el 2007 ficha con Bombardier y participa en el Lisboa-Dakar quedando tercero en la categoría de Quads, en el 2008 se hace con el título de campeón en quads en la prueba de la Baja Aragón, y un año más tarde, cruza el Atlántico para terminar noveno en Quads en el Dakar de América del Sur. Y te aseguramos que no se queda quieto, porque cuando tiene un rato libre te organiza desde su tienda Motos José en Logroño un Camino de Santiago o se da la Vuelta a España, todo ello sobre scooters de estricta serie. Para ello, cuenta siempre con sus incondicionales amigos de Logroño que se apuntan a un “bombardeo” donde se les requiera.

La aventura que os comentamos partió de una sugerencia de Keeway: iban a comercializar la trail TX 125 con motor 4T refrigerado por aire y cambio de cinco velocidades (actualmente ya está a la venta), y querían demostrar al público su robustez mecánica poniéndola en manos de José María Peña. Jose les propone salir de la península y meterla en una ruta por África finalizando en un escenario con dunas. Sin duda, la prueba más dura que se le puede poner a una trail “de calle” y con más motivo cuando su cilindrada es de unos modestos 125 cc.

La propuesta se completa con un equipo de cinco motos y siete pilotos que se van rotando sobre ellas, y una furgoneta de asistencia en cuyo interior se encuentra una sexta Keeway TX 125 por si falla alguna de las cinco anteriores. En el equipo entra por supuesto Peña y su compañero de fatigas Julián Polo; dos pilotos profesionales, pero para demostrar que la aventura está al alcance de cualquier usuario, “fichan” también a Enrique San Miguel (se dedica a los Muebles), Miguel Ángel Olave (Camionero), David Caro (experto en mecánica que regenta un Taller de Chapa), y Ricardo Gómez (vendedor de Coches) que, junto con Julián Polo, ponen con sus 110 kilos de peso un pesado lastre para las TX 125. El séptimo componente es Raúl Alba, Director de Keeway España, que aporta también un perfil de usuario normal.


Los preparativos

Aventura Keeway TX 125Las seis Keeway TX 125 llegan matriculadas una semana antes y con 0 kilómetros a la tienda de Peña en Logroño. A partir de ahí, se ruedan al menos 300 kilómetros cada una de ellas para que se suelten para la aventura y cambiarles el aceite. A dos de ellas se les monta una toma de corriente de la batería para poder llevar un navegador GPS, cinco llevan en la barra de refuerzo del manillar un depósito auxiliar de un litro para prolongar la autonomía (la sexta es la de emergencia que no llegó a sacarse de la furgoneta), una llevaba una bolsa sobre el transportín trasero en la que se incluía la cámara de fotos y un botiquín, y otra (la de Jose) montaba un baúl de 29 litros con herramientas y recambios. Obviamente, en la furgoneta se llevaba un taller móvil muchísimo más completo, con bidones de gasolina incluido, pero había que estar preparados para ser autónomos si la furgoneta fallaba.

Para el que se anime a realizar una aventura de este tipo le comentaremos que en ese baúl se llevaba una cámara delantera, otra trasera, cadena, maneta de freno, maneta de embrague, dos bujías, cable de embrague y de acelerador con sus respectivos prisioneros, varias bridas, cinta americana, alambre, tornillería variada y un juego de herramientas.

A todas las motos se les monta unas manoplas en el manillar que resultaron ser muy eficaces contra el frío (cuando llegó el calor se desmontaron), se les desmontan las gomas de las estriberas del conductor (para mejorar el agarre en barro con botas), y se retiran las estriberas del pasajero para que no molesten. Todas mantienen la instalación de intermitentes e incluso los dos espejos retrovisores.

También, desde Logroño, se ocupa Raquel de hacer todos los preparativos para atravesar el Estrecho solicitando con antelación los billetes del Ferry Algeciras-Ceuta y Nador-Almería, y los papeleos para las aduanas. Recordar que para pasar a Marruecos es necesario el pasaporte y, con motos a nombre de Keeway España, autorizaciones y más papeleos.

Serán finalmente cinco días de aventura. El primer día (viernes 27 de abril) se emplea para desplazarse desde Logroño a Algeciras, pasando la noche allí. A primera hora de la mañana del segundo día, se atraviesa el Estrecho para pasar en Ceuta la frontera con Marruecos y desplazarse por carreteras y caminos hasta Merzouga. El tercer día se dedica a disfrutar “sudando” de las dunas, para iniciar el cuarto el camino de vuelta, en el que se busca variar el itinerario por Nador-Almería. El quinto (martes 1 de mayo) se acaba en Sant Quirze del Vallés (Barcelona), localidad donde se encuentra Keeway España, recorriendo todo el litoral este de la península.


Primer día: Logroño-Algeciras

Aventura Keeway TX 125Se parte a las cinco de la mañana de Logroño, con mucho frío, dirigiéndose a Soria a través del puerto de Piqueras. Desde allí se enfila hacia Plasencia para bajar por la “Ruta de la Plata” hacia el sur. El grupo circula por carreteras de segundo orden con muchas curvas y con la dificultad añadida de la lluvia que acompañaría a los aventureros durante prácticamente toda la jornada. Máxima precaución para no fastidiar el inicio de la aventura; los neumáticos mixtos que calzan las TX dan confianza, mostrando una buena evacuación del agua. Con tanta lluvia, la furgoneta sirve para entrar en calor y como comedor improvisado.

Al llegar a Sevilla deja de llover e incluso aparece el sol, lo que da un respiro a los aventureros. Desde Sevilla se toma dirección por autopista a Jerez. Al coincidir con el Gran Premio de Jerez, el equipo es detenido junto con otras 800 motos más en un control de la Guardia Civil para revisar documentaciones; se les comenta a los agentes la aventura y éstos dejan pasar libremente al equipo para no entorpecerles.

Al final se llega a Algeciras a las 9 de la noche. Una buena ducha y cena y a descansar.


Segundo día: Algeciras-Ceuta-Merzouga

Aventura Keeway TX 125A las 6 y media en la puerta del hotel. Amenaza lluvia y el suelo está mojado. Antes de embarcar en el Ferry se llenan depósitos de gasolina y, primer incidente: una de las TX patina en una rotonda y cae el suelo. Nada que lamentar: un intermitente que se arregla con cinta aislante y maneta de embrague rota; las manetas cuenta con una muesca para controlar este tipo de rotura, y solo se pierde el extremo final.

En Ceuta los papeleos de aduanas consumen casi dos horas. Y se inicia la travesía de Marruecos acompañada por lluvia. El momento más crítico de la aventura tiene lugar entre las localidades de Tetuán y Chefchaouen: una pequeña carretera que atraviesa un puerto de montaña y que se encontraba cubierta de gasoil. La situación era tensa por lo resbaladizo del firme; incluso resultaba muy difícil mantener el equilibrio y la velocidad se hacía muy lenta con el consiguiente problema de bajar bastante la media y llegar al destino demasiado tarde. El tramo se cubrió en 3 horas, llegándose a recorrer tan solo 25 km en una hora.

Después vendría la cordillera del Atlas con alturas de más de 2.150 m y temperaturas incluso bajo cero. Las Keeway TX 125 notaban la falta de oxígeno por la altitud y, como consecuencia, sus prestaciones bajaron considerablemente, aparte de que los desniveles también bajaban la media. Una vez pasado el Atlas, el paisaje se hizo más árido y la temperatura subió.

La noche se echaba encima y, a partir de Rissani, se tuvo que recurrir al GPS para completar la etapa. El grupo se perdió en varias ocasiones y llegó finalmente a su destino a las 2 de la mañana, el Albergue de Alí el Cojo al lado de las dunas de Erg Chevy. Una agotadora jornada de 20 horas encima de las motos.


Tercer día: Dunas en Merzouga

Aventura Keeway TX 125La jornada se presenta muy tranquila. La única misión del grupo consiste en disfrutar a tope de las Keeway TX en las dunas que están al lado del Albergue de Alí el Cojo. Así que, después de un suculento desayuno para recuperar fuerzas y del rutinario mantenimiento matinal de las TX donde se revisan niveles de aceite y se tensan las cadenas.

En las dunas, las TX se mueven con facilidad. Les falta lógicamente algo de potencia con 125 cc y esto obliga a pasarlas muy decidido con gas a fondo y sujetando con fuerza el manillar para no caer en una rodera, aparte de abusar del embrague. Otro de los puntos a tener en cuenta al atravesar suelos arenosos como las dunas es bajar la presión de las ruedas; en carretera las 5 TX llevaban una presión de 2 kg/cm2, mientras que en las dunas se bajó a 0,7 kg/cm2 para conseguir más superficie de contacto.

Tras poco más de dos horas y para no tentar la suerte con la integridad de las mecánicas en el viaje de vuelta, se da por concluida la experiencia en las dunas y el grupo completa el día recorriendo los pueblos cercanos para conocer las costumbres y cultura.


Cuarto día: Merzouga-Nador-Almería

Aventura Keeway TX 125De nuevo amanecía con buen tiempo y a las 5 de la mañana, el grupo estaba listo para desayunar y comenzar el camino de vuelta desde el Albergue de Alí el Cojo. De nuevo revisión de niveles de aceite, tensión de la cadena y sobre todo filtros de aire por la arena de las dunas, y vuelta a casa desandando el camino andado que se hizo de noche. Poco antes de llegar a Midelt, desvío por la N15 con destino Nador.

En los preparativos se sabía que las gasolineras escaseaban y los 250 km de autonomía reales de las TX no serían suficientes, por lo que se llenó una gran garrafa en la furgoneta además de los depósitos auxiliares de cada moto.

La gasolina de Marruecos no es de buena calidad comparada con la de España. Con sistemas de inyección electrónica, el problema de la calidad hubiera sido más delicado, pero los carburadores la aceptaban sin problemas.

Después de la mala racha de los dos primeros días, el camino de vuelta con buen tiempo se hacía muy rápido. Incluso todos notaron que, cuando los cuentakilómetros superaron los 2.000 km, los motores de las Keeway se soltaron del todo. Esto suponía ver en el velocímetro unos 12 km/h más que al principio: la aguja llegaba a alcanzar los 120 km/h que, según el GPS, son unos 80-82 km/h reales de media y unos 90-95 llaneando y cuesta abajo.

Tan bien iba la cosa que el grupo llegó a Nador con 2 horas de adelanto sobre el horario previsto, lo que permitía hacer los papeles de aduanas sin problemas y sin prisas. La noche se pasó en el Ferry durmiendo en camarotes.


Quinto día: Almería-Sant Quirze del Vallès (Barcelona)

Aventura Keeway TX 125A la llegada al Puerto de Almería comenzaba la última etapa de la aventura que conduciría al grupo a Sant Quirze del Vallès, localidad de Barcelona donde se encuentran las oficinas y almacenes de Keeway España.

El viaje de vuelta transcurre con total normalidad intentando evitar autovías y autopistas pero, como en el día anterior, con plena confianza en la robustez de las mecánicas y llevándolas a tope sin que en ningún momento llegasen a “rechistar”.

Al final las cinco Keeway TX 125 han recorrido 3.500 kilómetros cada una casi siempre con gas a fondo, consumiendo un promedio de poco más de 122 litros por moto, lo que hace un consumo de 3,58 litros a los 100 km. Se llegó a registrar un consumo mínimo de 2,89 l/100 en una de las motos y en un parcial, y un máximo de 4,30 l/100 km.

La opinión generalizada de la TX por el equipo de aventureros es que es una moto robusta y muy dura. El freno de disco delantero hace un buen papel y el posterior resulta un poco justo. La moto es tirando a alta y ofrece una postura de conducción realmente cómoda, algo fundamental para afrontar largos recorridos. En definitiva, ha dejado al grupo un buen sabor de boca.


Recuerdos de la Aventura

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Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
José María Peña en una gasolinera próxima a Sevilla el viernes 27 de abril. Coincidía también el fin de semana con el MotoGP y estaba muy concurrida por los aficionados. Fijaros en las manoplas acopladas al manillar y que redujeron el frío los dos primeros días.
La primera etapa de esta aventura concluyó en Algeciras. Fue un día duro con la lluvia casi presente todo el día, pero lo que vendría al día siguiente iba a ser todavía peor.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
Raúl Olave repostando su TX, mientras que Enrique San Miguel toma nota de los kilómetros recorridos y los litros de gasolina que se han repostado para llenar a tope el depósito.
A primera hora de la mañana el segundo día con los depósitos de gasolina llenos y listos para embarcar en el Ferry en el puerto de Algeciras.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
En la bodega del Ferry, las motos se fijaron con correas al suelo para evitar disgustos producidos por el oleaje.
Nada más cruzar la frontera se paró en un gasolinera donde sus dueños permitieron cobijarse al grupo de la lluvia para cambiarse y comenzar la ruta africana.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
La furgoneta que hizo de apoyo durante todo el viaje también ocupó también su sitio en la bodega del Ferry.
Buen humor en el Ferry. El trayecto de Algeciras a Ceuta llevó 55 minutos que fueron bien aprovechados para descansar. Durante el viaje se puso a llover como se ve en los cristales.
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En la frontera de Ceuta con Marruecos esperando turno como otro vehículo más. Los aventureros iban preparados para afrontar el papeleo e incluso les echó un cable un familiar de Ceuta: dos horas para estar al otro lado, no está mal.
Raúl Alba a la salida de Ceuta. Había parado un momento de llover y se aprovechaba para hacer kilómetros aunque las nubes del fondo volvían a amenazar.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
La autopista que une Ceuta con Tetuán no tiene nada que envidiar a las españolas por trazado, firme y anchura de los arcenes. Después, la cosa cambiaría…
Este es el Marruecos profundo antes de cruzar la cordillera del Atlas. Los animales se mueven con total libertad y la anchura del firme de la carretera se reduce al mínimo.
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David Caro cruzando una vía urbana en la Keeway TX. Fijaros en el depósito auxiliar de un litro de gasolina (color blanco) fijado al refuerzo central del manillar.
La moto de José María Peña montaba sobre el portabultos trasero un baúl de 29 litros en el que llevaba repuestos y herramientas. Sobre el manillar montaba GPS y el depósito auxiliar.
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Este es el interior de la furgoneta en el que se encontraba la sexta Keeway TX de emergencia. Tenía terminado el rodaje pero nunca llegó a utilizarse.
Todas las mañana, antes de iniciar la marcha se hacía una revisión general a cada una de las TX revisando el nivel de aceite motor (ninguna perdió aceite) y tensando la cadena.
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En las instalaciones de Alí el Cojo preparándose para disfrutar de las dunas en la mañana de la tercera jornada.
Detalle de la moto de José María Peña con la llave roja del baúl atada al latiguillo del freno delantero para que no se pierda y la toma de corriente de la batería para el navegador GPS.
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José Maria Peña después de probar la TX en las dunas, mientras que Raúl Alba observa a los compañeros antes de comenzar su experiencia.
Raúl Alba intentando salir de la duna remando con los pies. La mochila que lleva cada miembro del equipo estaba llena de regalos para los chavales marroquíes.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
David Caro sudando la gota gorda literalmente después de su primera experiencia con las dunas. ¿Quién dijo que montar en moto no es deporte?
Julián Polo en uno de los “oasis” de la zona de las dunas. En un panel de la pared, los visitantes colocan sus pegatinas como recuerdo, en este caso la de “Actitud On”, un grupo riojano que anima a tener una actitud positiva en estos momentos de crisis.
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Miguel Ángel Olave se queda clavado en la arena y Julián Polo se presta a ayudarle.
Julián Polo ya tenía experiencia en dunas con quad y aquí lo demuestra con gesto sonriente. David Caro muestra el gesto contrario por los esfuerzos.
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Atardecer en la zona de Merzouga. En el horizonte se ven las luces de las casas de los poblados.
Uno de los camiones de la zona cargado hasta los topes literalmente. Todos los cacharros están perfectamente sujetos por una red que les impide caerse.
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El Albergue de Alí el Cojo está ampliándose para recibir más visitas. Está a pie de las dunas y te acojen con muy buen trato.
De izquierda a derecha todos los aventureros posan junto a Alí el cojo. De izquierda a derecha y con ropa de paisano: Ricardo Gómez, David Caro, Miguel Ángel Olave, Enrique San Miguel, José María Peña, Alí el Cojo, Julián Polo y Raúl Alba.
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José María Peña posa con la TX “clavada” en la arena. Como puedes comprobar se mantiene sola de pie sin más ayuda que la de la arena.
Este geiser es el más espectacular. Fijaros en la altura que alcanza el agua.
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A la salida de Fut se encuentra esta zona con géiseres. El agua que emana del suelo sale a una temperatura de 50ºC.
En la ruta de vuelta con dirección a Nador escasean las gasolineras. Cuando veas una, llena a tope el depósito porque vas a apurar la autonomía al máximo hasta que encuentres la siguiente. La cordillera del Atlas (al fondo, casi una pared) ya no daba tanto miedo como a la ida.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
Da gusto ir con tiempo de sobra. A pocos kilómetros antes de llegar a Nador tomando un merecido descanso con tertulia.
En esas largas rectas, el ferrocarril acompañaba durante mucho rato. Al final todos acababan en Nador.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
Los chavales volviendo del colegio se animaban al ver pasar tanta moto junta y del mismo modelo.
Julián Polo llevaba preparados regalos (bolígrafos, pegatinas, llaveros, …) para los chavales marroquíes.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
Antes de llegar a Nador te encontrabas con rectas prácticamente interminables de 30 kilómetros de largo en zona llana. Sobre las TX, con gas a fondo, probabas de todo para desentumecer los músculos, como estirar las piernas.
Otra de las paradas que se hacían en el camino de vuelta al rodar con tiempo suficiente. Ocasión para estirar piernas y comentar con los compañeros las sensaciones.
Aventura Keeway TX 125 Aventura Keeway TX 125
El grupo de aventureros llega a Nador para despedirse de África. Huele a mar y se dirigen a su puerto.
Ha llegado a su destino. El grupo de aventureros (solo falta Raúl Alba) en la sede de Keeway España en Sant Quirze del Vallès (Barcelona). De izquierda a derecha: David, Julián, Enrique, Ricardo, José María y Miguel Ángel.

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