- Autor del texto – Antonio Cuadra (Enviado especial)
- Autor de fotos – AC/LML
- Fecha – 19/10/2012
El proyecto de la LML Star 4 con transmisión automática por variador ya se da por concluido por parte de la firma hindú, al menos para la cilindrada de 125 cc. Recordemos que, en el pasado Salón de Milán se presentó la solución Star 4 Light con bastidor de chapa autoportante de menores dimensiones. Al final la solución para la cilindrada de 125 cc pasa por volver a emplear el bastidor grande de Star 4 manteniendo dimensiones pero consiguiendo rebajar el peso final considerablemente con la nueva mecánica y dándole en su utilización urbana más ligereza y agilidad.
Y aunque por fuera mantiene la imagen característica de las LML Star 4, lo cierto es que hay muchos pequeños cambios. El primero es que el cárter de la transmisión va por el lado izquierdo con lo cual la rueda de repuesto cambia al interior del cófano derecho. También desaparecen muchos pequeños detalles: el puño izquierdo es fijo al no haber cambio de marchas, tampoco hay pedal de freno ya que lo que antes era maneta de embrague es ahora maneta de freno trasero, y los dos mandos que se encontraban debajo de la parte delantera del asiento, el grifo de gasolina con la posición de reserva y el pomo del estárter, ya no están al emplear sistemas automáticos. Pero ahí no acaba la cosa; también hay mandos nuevos en el manillar como el botón amarillo en la piña izquierda para parar el motor (ya no se puede parar metiendo una marcha) aunque esa función ya la tiene la cerradura de contacto, y dos testigos nuevos en el tablero de instrumentos (sustituyendo al del punto muerto y al testigo de inyección de la versión de 200 cc): uno que se enciende cada vez que se accionan los frenos, y el otro para avisar de averías en el funcionamiento del sistema del carburador electrónico (el carburador incluye un sensor de posición del acelerador que copn la información de la sonda lambda del escape y un sensor de temperatura del motor, actúan sobre el encendido para conseguir una combustión más eficiente).
Del motor también tenemos mucho que contar. Según declara LML es de creación propia con un cilindro vertical para aprovechar mejor el espacio de la parte posterior, refrigeración por aire forzado y culata de dos válvulas. Rinde un poco más de potencia que el anterior (9,25 CV a 8.000 rpm con algo menos de par por su carrera más corta) y LML asegura que gasta menos que un mechero: 46 km recorridos con un litro de gasolina. La autonomía es uno de sus puntos fuertes porque el depósito de 5,5 litros anterior aumenta hasta los siete litros. LML utiliza un ingenioso sistema de ventilación denominado LIAS (LML Inlet Air System, sistema de admisión de aire LML) que proporciona aire tanto para la refrigeración del motor, transmisión y carburación por medio de varias toma (de las ranuras de los cófanos y desde la parte inferior del escudo frontal a través de un conducto por debajo del scooter, saliendo el aire caliente por la parte inferior trasera del asiento. En la base mecánica de LML ha participado Del’Orto con el sistema de carburador electrónico y encendido, y la también italiana Adler en la transmisión por variador.
En resumen, un modelo que va a encajar muy bien con un público que le gusta el estilo clásico del LML Star 4, pero que no se maneja bien con el cambio de marchas. En Italia ya ha empezado su distribución a un precio muy atractivo. A España nos llegará justo con el comienzo de año, pero de precio todavía no podemos adelantar nada.