- Autor del texto – Antonio Cuadra
- Autor de fotos – Bordoy/QJ
- Autor acción – AC
- Fecha – 23/4/2024
QJ Motor continúa su expansión en nuestro mercado con el refuerzo de una familia de scooters entre los que se incluyen dos modelos de 125 cc (y de camino, antes de que acabe el verano, un tercero). Con ellos, quiere competir en dos de las categorías más populares del público de la convalidación moto-coche: el polivalente MTX y el retro LTR. En esta ocasión empezaremos por el MTX que cuenta con buenos argumentos para destacarse en su categorías: casi 15 CV de su motor con refrigeración líquida y propulsión híbrida, alto nivel de equipamiento tecnológico, atractivo diseño y precio muy competitivo: 2.999 €.
Todavía no ha cumplido 2 años en nuestro mercado y QJ Motor, la marca de Quianjiang, aumenta su gama hasta los 16 cubriendo todas las cilindradas desde los 125 hasta los 800 cc, y ahora también en los scooters. Nos invitaron a Castelldefels para conocer sus novedades de los cuales 2 son de 125 cc, MTX y LTR, el Fort 4.0 y el ATR 125 un scooter CrossOver que llegará para antes de que acabe el verano (con él la gama QJ para 2024 llegará a los 17).
Y no serán los últimos. La gama de QJ Motor para el mercado doméstico chino cubre más de 90 modelos, sin contar con versiones y cilindradas diferentes, por lo que hay para elegir y adaptarse al gusto del usuario europeo, y más concretamente, al español que domina las ventas en la cilindrada de la convalidación.
En esa primera elección de candidatos a superventas, QJ Motor España, ha ido a una apuesta segura: el QJ MTX 125 representando al segmento de los scooters polivalentes compactos, y el LTR para competir en el de los urbanos “retro” de corte clásico.
En esta ocasión nos centraremos en el MTX: el polivalente compacto.
QJ Motor MTX 125
Sin duda es el modelo del que se siente más orgulloso QJ: un scooter que va a dar guerra en la categoría de los scooters polivalentes compactos donde domina el PCX de Honda y el NMax de Yamaha. El MTX iguala a ambos con una estética de Mini GT compacto con travesaño central para esconder el depósito de 8 litros, ruedas medias de 14 y 13 pulgadas, alumbrado LED al 100%, motor con refrigeración líquida de radiador lateral, y parabrisas, incluso algo más elevado que lo que se estila en este segmento.
Pero sobre esta base, QJ quiere ganarse al público con buenos argumentos: un motor de 4 válvulas que declara 10,8 kW, o lo que es lo mismo 14,7 CV a 8.750 rpm casi en el límite de los 15 CV permitidos y muy por encima de lo que rinden sus actuales rivales. Este mismo motor incluye sistema Start&Stop de parada a ralentí.
A este interés por destacarse en prestaciones se añade un gadget tecnológico: el sistema Microhíbrido. Se trata de convertir el alternador en motor eléctrico, como ya lo hace en el sistema de parada a ralentí, pero no como motor de arranque eléctrico sino como un motor auxiliar que ayuda al motor térmico a dar más empuje en las aceleraciones. El sistema deja de funcionar cuando se cumple alguna de estas tres condiciones: 8 segundos de funcionamiento, el motor térmico funciona a más de 7.500 rpm, o la tensión de la batería no alcanza los 12,1 V.
Si en un scooter de 125 cc, lo habitual es encontrarse con baterías de 7Ah, el uso de este sistema obliga a duplicar la capacidad de la batería hasta los 14 Ah, pero a cambio, también hay que añadir otras ventajas, además de sus fulgurantes aceleraciones: potencia extra, menor consumo, y reducción de emisiones de gases y ruido.
Y el MTX tiene más argumentos de venta. Para empezar el cuadro de instrumentos se basa en una pantalla TFT a color de 5 pulgadas con mucho contenido informativo. Sólo cuenta con una sola visualización que cambia a negativo con baja luminosidad exterior para no deslumbrar, si se escoge el cambio automático. También incluye conectividad con el móvil a través de la App gratuita Carbit Ride incluyendo la funcionalidad Mirroring de clonar la pantalla de tu móvil en el TFT completándola con la información básica de conducción (velocímetro, niveles de gasolina y temperatura, etc.).
Más detalles, el sistema Keyless con llave inteligente de proximidad que incorpora una llave mecánica para acceder a la batería si se ha descargado a través de una cerradura oculta. Esa misma llave sirve para abrir el baúl trasero Shad SH33 que se incluye gratis de serie y que permite guardar un casco integral y algo más (bajo el asiento, las grandes dimensiones de la batería solo permiten alojar uno abierto).
Y muchos más detalles como los frenos de disco wave con ABS, las manetas regulables en distancia al manillar con bloqueo de freno de estacionamiento para el trasero, mandos en las piñas retroiluminados, faro LED con cuatro focos polielipsoidales, dos guanteras con doble toma de carga USB (normal y C) y preinstalación para cámara onboard.
En marcha, el MTX se muestra muy suave de funcionamiento, fácil de conducir y a partes iguales manejable en ciudad y estable en carretera. En su velocímetro llegamos a ver unos optimistas 116 km/h y sus 14,7 CV se notan en aceleraciones con la ayuda inicial del sistema híbrido. Por frenos hay potencia de sobra, interviniendo, como ya va siendo costumbre, el canal trasero del ABS a la mínima, mientras que el delantero apura más la frenada.
Una muy buena alternativa a tener en cuenta y con más motivo por su precio de 2.999 € (disponible desde ya en negro, gris y blanco) con el baúl incluido, y que se acoge a la garantía de 6 años como el resto de la gama QJ.
Primer vistazo QJ MTX
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