- Autor del texto – Borja Hernández (Enviado Especial)
- Autor de fotos – B.H.
- Fecha – 20/11/2014
Las “carbonillas” chinos de los scooters babeaban literalmente en el stand de Kymco ante este Racing King. Un scooter deportivo que se convierte en el rey de las salidas de los semáforos gracias a su bajo peso y a la potencia que desborda su propulsor refrigerado por agua con inyección, derivado del que emplea nuestro SuperDink 125i, pero con la cilindrada aumentada hasta los 175,1 cc.
Bestial es la mejor manera de definir al Racing King de Kymco. Imagínate combinar un bastidor compacto de scooter urbano como el del desaparecido G5 125i con el motor refrigerado por agua, 4 válvulas, inyección del SuperDink 125i, pero no con los 15 CV que conocemos sino con muchos más (en ninguna parte se declara la potencia) gracias a que su cilindrada se ha elevado hasta los 175,1 cc.
Como para dejar atrás a los Yamaha T-Max 530 gracias a una previsible relación peso-potencia estratosférica, aunque sus ruedas de 12 pulgadas inyectan adrenalina en vena a los amantes del riesgo que lo conducen. Eso sí, nada de frenos disco-tambor sino discos lobulados en ambos ejes para detener esa caballería.
Sin duda es el arma urbana más efectiva y, por ello, el Racing King dispone de una amplia plataforma plana para apoyar los pies con el depósito debajo de ella y acceso en el cubrepiernas, y guantera abierta. Y como buen vehículo deportivo que pretende ser, doble óptica de faro frontal con elementos polielipsoidales combinados con “ojeras” de LEDs, horquilla invertida y un completo cuadro de instrumentos dominado por un reloj cuentavueltas (¡zona roja a partir de las 11.000 vueltas!) combinado con nivel de combustible y pantalla LCD.
