• Autor del texto – Enrique Montes
• Autor de fotos – Francesc Montero
• Autor acción – Enrique Montes
• Fecha – 07/05/2012

Más que un restyling, lo que ha hecho Peugeot con este nuevo Satelis es una profunda revisión. Estéticamente con la renovación del 80% de los componentes de la carrocería, mecánicamente con la adopción del motor LFE de bajas fricciones, y en la parte ciclo con una tercera generación de frenos ABS firmado por Nissin muy mejorado sobre los anteriores. Desgraciadamente, todo esto viene acompañado de un aumento de precio.

Ya le tocaba el cambio al Satelis. Desde el 2006 apenas había cambiado salvo pequeños detalles consecuencia de pulir defectillos, y ya empezaba a estar muy visto. En el fondo, el buque insignia de Peugeot es un buen producto, por lo que para la renovación se ha optado por mantener ese bastidor que tan buenos resultados da, poner al día su estética, mejorar la calidad de sus componentes y sustituir la mecánica por la LFE que estrenó el CityStar, aunque con algunos cambios.

Es algo más que un sencillo restyling: una profunda revisión. Y así, por ejemplo, en el apartado de imagen se ha cambiado más del 80% de los componentes que forman la carrocería (27 de las 33 piezas que componen su carrocería para ser exactos son completamente nuevos) dando como resultado una imagen distinta. En ese “New Look” diferente al de los 60.000 Satelis anteriores que se han vendido en toda Europa, se han implicado (y mucho) los diseñadores de la rama de automóviles. El nuevo estilo se basa en formas más suaves y fluidas frente a las duras rectilíneas anteriores y sigue las tendencias actuales sobre todo en lo que se refiere a la firma luminosa con cierta agresividad (mirada más incisiva) incorporando por primera vez el recurso de los diodos LEDs para la luz de posición de la doble óptica delantera y piloto posterior. Se combinan a la perfección los tonos de pintura mate con detalles en cromado que aportan mucha elegancia y estrena diferentes procesos innovadores en la fabricación para superarse en calidad, como por ejemplo el tratamiento de la pintura con un nuevo sistema antiUV que permite que se conserven durante más tiempo los tonos originales sin el degradado característico de la luz solar.

Su asiento también es todo nuevo. El tapizado combina dos tipos de superficie antideslizante en las superficies horizontales con aterciopelado para las verticales, y todas sus piezas van unidas con doble cosido, Integra un respaldo para el conductor que en esta versión cubre mejor la zona lumbar, con el detalle del logo del león grabado en relieve en su parte posterior. Dicho respaldo con la banqueta del pasajero se abaten para dar acceso al espacioso compartimento de carga. Es profundo, ya que puedes introducir objetos de 70 cm largo (incluso más con el portón abierto y fijándolos con pulpos) y en su interior caben dos cascos integrales pero, sinceramente, cuesta buscarles la postura adecuada para que entren sin forzar el cierre.

La capacidad de carga se complementa con un bolsillo central muy disimulado en el centro del manillar para guardar las gafas o vaciarse los bolsillos, un bolsillito en la parte delantera del asiento para guardar el chubasquero que lo cubre los días de lluvia, y una guantera con cerradura a la izquierda del manillar, en cuyo interior se encuentra una toma de 12 V para cargar el móvil.

Uno de esos detalles donde se nota la colaboración del departamento de diseño automovilístico de Peugeot es en el tablero. Se sigue repartiendo la información en tres esferas, con velocímetro y cuentavueltas analógico en las de la izquierda y derecha respectivamente, dedicando la esfera central a una pantalla LCD de 3,2 pulgadas, un 60% mayor en superficie para facilitar su visualización de reojo, y que ahora viene retroiluminada en azul intenso, aportando así un aire más “cool” al puesto de conducción. En esa pantalla hay muchos detalles que le harán sentirse como en casa al usuario del coche, como por ejemplo el ordenador de a bordo que indica en tiempo real consumos y autonomía restante, algo poco visto en el mundo de las dos ruedas y mucho menos en el de los 125 cc. También hace un promedio de la velocidad y consumo, indica temperatura ambiente y del motor, y avisa de cuándo toca hacer la revisión.

A bordo

Nada más acomodarte en su asiento aprecias dos cosas: que tiene tamaño de megascooter y que se llega bien al suelo con las dos plantas de los pies. Y ese cuerpo grande se nota al conducir: hay habitabilidad de sobra. Vas como un señor, sin estrecheces, tanto con los pies en las plataformas planas (ciudad) como estirando las piernas (carretera). Tan grande que midiendo 1,84 m cuesta hacer tope en el respaldo; los menos altos seguro que ni lo llegarán a utilizar y eso que envuelve muy bien.

Ese cuerpo de megascooter le viene de que, en la versión anterior, el mismo chasis hacía de “esqueleto” para la versión de 500 cc con motor Piaggio MASTER. Actualmente, este nuevo Satelis 125i también se ofrece con motor de 300 cc, y esperemos verlo a corto plazo con la mecánica de 400 cc que estrenará el Metropolis de 3 ruedas. Pero aunque sea un scooter de dimensiones grandes, no resulta un armario ropero para la modesta mecánica de 125 cc. Todo lo contrario, es relativamente ligero e incluso ágil. No conduces “embutido” en el Satelis; sientes todo el scooter abajo, muy pegado al suelo (centro de gravedad bajo) y eso te permite cambiar de dirección con rapidez: entra muy bien en las curvas y se recupera sin problemas. Se maneja muy bien con la cintura y da confianza.

El motor LFE ya nos dejó buen sabor de boca en el CityStar. De hecho, aquel modelo se ha convertido en el scooter de 125 cc más rápido del mercado como puedes ver en el ranking de la columna de la derecha. Pero el que encontramos en este Satelis no es el mismo. No es tan “zumbón” por aquello de rodar muy alto de vueltas, el desarrollo final que monta es más corto, e incluso el tope de revoluciones se ha bajado. Está claro que montado en el Satelis, la situación cambia porque es 12,2 kg más pesado que el CityStar, pero tampoco registra mejores prestaciones si lo comparamos con el que lanzaba la versión anterior del Satelis a 116,5 km/h. Ha perdido casi 4 km/h y esto le posiciona fuera del Top Ten de las motos y scooters de 125 cc más rápidas. Lo que sí que se nota es el consumo, las bajas fricciones del LFE se manifiestan bajando el gastos de combustible por debajo de los 4 litros/100 km.

Al margen de las cifras registradas, al LFE no se le puede discutir que acelera con ganas y recupere bien, con un funcionamiento suave y silencioso.

Donde también se nota el tamaño grande es en protección: el escudo frontal es ancho y el parabrisas muy envolvente. Está claro que te vas a mojar poco y vas a pasar poco frío.

Línea de tierra

En lo que respecta a parte ciclo se siguen conservando las ruedas de 14 y 13 pulgadas para los trenes delantero y trasero calzadas con neumáticos Michelin SC, con sus correspondientes frenos de disco de 260 y 210 mm, pero lo mejor de esta versión Urban es su sistema de frenos ABS. Emplea un modulador de tres canales con lo que se consigue además de controlar posibles bloqueos en las dos ruedas, manejar de forma combinada a través de la maneta izquierda los frenos delantero y trasero, dejando solo el delantero en la maneta derecha.

Su funcionamiento nos pareció excelente. Lógicamente al ser combinado, es poco intrusivo y apura más el funcionamiento del ABS en la maneta izquierda. Y aunque los resultados no los hemos podido contrastar numéricamente con el de la segunda generación, te aseguramos que además de superar el recorte de distancia de frenada en cualquier condición, será muy difícil de mejorar “manualmente” por los conductores más expertos.

En lo que respecta a suspensiones, el Satelis 125i sigue conservando los mismos elementos del modelo precedente, esto es, una rígida horquilla con barras de 37 mm y un par de amortiguadores Paioli con cuatro posiciones de ajuste de precarga. En cualquier condición de uso, muestran un tarado más que correcto para ablandar todo tipo de irregularidades sin transmitirlas al conductor.

En compañía

El pasajero también gana con el cambio. Sigue contando con un amplio asiento con unas asideras laterales a las que se agarra cómodamente (diseño acertadísimo incorporando la iluminación posterior) y que sirven para sujetar el equipaje con pulpos cuando se circula sin compañía y con el portón abierto.

Una de las novedades que aporta el nuevo Satelis 125i y que va a a agradecer nuestro acompañante son las estriberas abatibles, solución más cómoda que las fijas anteriores y que permiten apoyar los pies sin arquear las piernas para salvar la anchura del cuerpo trasero de la carrocería.

La altura de su asiento ha disminuido en 15 mm colaborando en ese centro de gravedad bajo y facilitando de este modo la incorporación del pasajero para acomodarse.

Con lupa

Haz click sobre la imagen para ampliar

La instrumentación la compone un reloj velocímetro y un cuentavueltas con un gran display digital entre ambos que incorpora todo tipo de información muy legible, entre ella un ordenador de abordo que facilita consumos instantáneos y medios.	El asiento cambia en formas, mullido y tapizado. Incorpora un envolvente respaldo para el conductor, y una trampilla en la parte delantera para esconder el chubasquero. El del pasajero es más bajo lo que facilita acomodarse y bajar el centro de gravedad.	La motorización del Satelis 125 es la LFE de bajas fricciones que ya conocíamos del CityStar aunque en este Satelis ha perdido algo de alegría desarrollando menos prestaciones que la versión precedente aunque con un consumo más bajo.
La doble óptica de faro delantera gana en superficie de iluminación. Se emplean también diodos LEDs para la posición en la hilera que rodea su parte inferior, imprimiendo al conjunto una firma luminosa muy personal.	Tren delantero de lujo con rueda de 14 pulgadas calzada con cubiertas Michelin SC. El disco delantero sigue siendo de 260 mm pero ahora cuenta con pinza Nissin de anclaje flotante con tres pistones en esta versión ABS.	El travesaño central del Satelis incluye el depósito de combustible con capacidad para 13,2 litros. Con el bajo consumo del motor LFE, dispones de una autonomía más que sobrada. El tapón de llenado se encuentra bajo una tapa con cerradura.
La firma luminosa del Satelis también se reconoce desde atrás. La luz de posición la forman dos barras verticales iluminadas a cada lado. Entre ellas se encuentra por la parte superior una matriz de diodos LEDs que se iluminan con el freno y debajo la bombilla de los intermitentes.	Las estriberas del pasajero dejan de ser fijas y ahora son desplegables. Un punto a favor de su comodidad. Se pueden extender con la punta del pie sin agacharse y disponen de una superficie superior de goma antideslizante.	La pata de cabra es un detalle a imitar por otros modelos no solo porque ofrece un buen apoyo estable sino porque, extendida, se puede dejar el motor a ralentí (no deja que supere las 2.000 rpm) permitiendo el calentamiento del mismo.
El disco trasero es de 210 mm y se encuentra en el interior de la rueda trasera, un lugar poco apropiado para su refrigeración. No obstante esta versión con ABS no mostraba síntomas de fatiga por achicharramiento.	Todos los rincones se aprovechan en el Satelis. Por ejemplo, en el centro del manillar se dispone de esta miniguantera para vaciarse los bolsillos, llevar monedas para el peaje o las gafas. Eso sí, cuando lo aparques no olvides vaciarlo: no tiene cerradura.	A la izquierda de la base del manillar encontramos esta guantera con cerradura de generosa profundidad. Su interior incluye una toma de corriente de 12 voltios para cargar sobre la marcha el teléfono móvil, por ejemplo.
La parte posterior tiene un diseño muy automovilístico. Las asideras laterales forman parte del diseño del piloto posterior. Si utilizas el Satelis sin pasajero puedes llevar objetos grandes con el portón abierto atándolos con pulpos a esas asideras.	Otro rincón aprovechado es el de la parte delantera del asiento. La trampilla que veis abierta esconde una funda-chubasquero que cubre el asiento protegiéndolo de la humedad los días de lluvia.	La cerradura de contacto se encuentra en el interior de esta hendidura para evitar que, en un frenazo, la rodilla derecha se golpee contra ella. Un poco más abajo puedes ver el gancho portabolsas.
El interior del hueco bajo el asiento del pasajero tiene buena capacidad pero hay que cogerle el truco para introducir dos cascos integrales. En el lateral podemos ver la iluminación para ayudar buscar en el interior por la noche o en el garaje.	Cuando se corta el contacto, las luces de posición delantera y trasera no se apagan al instante sino que se iluminan durante un rato para que no dejarte a oscuras de noche o en un garaje y que puedas guardar el casco en su sitio.	La piña derecha incluye por su parte delantera un gatillo con el que se controlan sobre la marcha las diferentes funciones del ordenador de a bordo que incluye el nuevo Satelis: consumos instantáneos, promedios, etc.

 El detallazo

Peugeot se puede sentir orgullosa de ser la primera marca que introdujo el sistema antibloqueo ABS en un modesto scooter de 125. Desde que lo estrenó hasta este nuevo Satelis se contabilizan tres generaciones, y aunque repite colaborando con Nissin, los resultados de versión 3.0 son los mejores con mucha diferencia.

Para empezar, ha cambiado de un modulador de un canal que solo controlaba los bloqueos de la rueda delantera a uno de tres canales que maneja las dos ruedas de forma independiente y la delantera cuando se acciona la maneta izquierda. Es pues un sistema combinado: la maneta delantera se ocupa de dos de los tres pistones de la rueda delantera, mientras que la izquierda lo hace con la pinza posterior y el tercer pistón de la delantera. Para evitar que entren en funcionamiento a la vez los frenos delantero y trasero, se intercala una válvula de retardo. Ésta hace que se retrase un cierto instante la presión hidráulica sobre el tercer pistón para que no se hunda de golpe la horquilla delantera suavizando de esta forma la frenada.

Otro cambio de esta tercera generación es que desaparece el PBS, una especie de servofreno que potenciaba el accionamiento sobre la maneta y que resultaba demasiado brusco sobre todo en situaciones de pánico. También desaparecen esos zumbidos y ruidos de “robot” que se producían al accionar solo la maneta derecha incluso en parado.

Este sistema de frenos es exclusivo en los acabados Urban y Executive; en este último se añade además un antirrobo Abus integrado con uno de sus extremos unido al chasis. El incremento de precio es de 500 € sobre la versión Premium sin ABS, algo dentro de lo normal si lo comparamos con los sobrecostes que fijan otras marcas en sus ABS, aunque con el cambio de versión de Satelis, el precio de adquisición de la versión Premium básica ha aumentado considerablemente (de 2.999 a 3.999 €).

Prestaciones con nuestro equipo de telemetría

Frenada Comportamiento Capacidad de carga	Dificultad alojamiento dos integrales Aumento de precio nueva versión Prestaciones inferiores

Rivales directos

Honda Scoopy SH 125i ABS Kymco SuperDink 125i ABS Peugeot Geopolis Urban

Piaggio X10 125 Executive Yamaha X-Max 125 ABS