- Autor del texto – Antonio Cuadra
- Autor de fotos – Intermot/kawasaki
- Fecha – 15/10/2022


Se puede apreciar que el falso depósito dispone de una trampilla para acceder a un pequeño compartimento donde guardar objetos, aunque queda descartada la posibilidad de que por su apertura se puedan extraer las baterías para su recarga en un domicilio particular.
El freno trasero se acciona como en las motos: por un pedal en el lado derecho. No hay caja de cambios ni embrague, lógicamente al ser un vehículo eléctrico. Es más, no hay maneta de embrague en el lado izquierdo del manillar. La rueda delantera cuenta con rueda fónica, y aunque no se ve en la rueda posterior, sí se puede ver el sensor de velocidad, por lo que también cuenta con ABS de doble canal.
A nivel de suspensiones cuenta con una horquilla tradicional de eje centrado (nada de invertida) pero sí que se ven las bieletas de la suspensión trasera.
Con esta presentación en sociedad, Kawasaki demuestra que está preparada para un futuro eléctrico, aunque dejaron claro que, de momento, siguen apostando por el motor de explosión.