- Autor del texto – Moto125.cc
- Autor de fotos – Rieju
- Fecha – 14/02/2012
La marca de Figueres se saca de la manga un nuevo modelo combinando el bastidor y carrocería de su Marathon (ADN de enduro) con el tranquilo motor refrigerado por aire que impulsa la Tango. El resultado es una trail europea que se encuentra muy a gusto en los desplazamientos por ciudad, vestida con un agresivo traje deportivo y todo ello rematado con un precio de escándalo: 1.999 €.
Puede parecer de mal gusto empezar una prueba comentando el tema “de dineros” pero de todas las virtudes que tiene esta nueva Marathon, el precio es, sin lugar a dudas, la mejor de todas. Y es que, evitar sobrepasar la barrera de los 2.000 euros con una trail-enduro de fabricación europea (Made in Spain para ser más precisos) es un logro que merece un aplauso sonoro, sobre todo en estos tiempos en los que se mira con lupa cualquier cosa que compres. Y es que, hasta ahora, si pensabas en una trail para pasear y contabas con ese presupuesto, no tenías más remedio que optar por lo poco que ofrece el mercado de segunda mano o por algún modelo de procedencia oriental.
Nadie te va a dar más calidad por 1.999 €, y encima con un aspecto tan pintón. Porque esta Marathon AC (iniciales de Air Cooled, o refrigerada por aire) comparte el mismo bastidor y plásticos de la refrigerada por agua apellida Pro que cuesta 3.865 €, por no hablar también de la Competizione de 4.956 €. Incluso hasta sale más barata que la Tango.
Exactamente el mismo bastidor perimetral de doble cuna en acero con los mismos plásticos, asiento y estructura posterior desmontable para facilitar la accesibilidad mecánica. Solo cambia la decoración, algo más sobria, y el conjunto de suspensiones y basculante que ahora es de acero en lugar de aluminio con las bieletas del monoamortiguador. Y obviamente el motor del que nos ocuparemos más tarde.
En ese precio también hereda una denominación legendaria: la de aquella Marathon de 75 cc que, al principio de la década de los ochenta, dió un gran impulso a Rieju por sus éxitos en las carreras de enduro. Con aquella Marathon 75, Rieju se ganó a un público juvenil que se estrenaba en el mundo de la moto, y con esta Marathon AC 125, 30 años después, a otra generación de jóvenes del A1 y adultos con carnet de coche que encuentran una moto de ocio y de uso diario a un precio más que razonable.
Sentado en la Marathon notas que llevas una moto grande. Para nada es un juguete. Lo que sí que se agradece es que la altura del asiento sea 5 cm más baja que la declarada en sus hermanas de mayor precio. Eso te permitirá remar sin problemas cuando se ponga difícil el terreno o “echar el ancla” cuando te detengas en un semáforo. También pone de su parte en esa facilidad para hacer pie la estrechez del conjunto asiento-bastidor.
Delante de su manillar con barra central de refuerzo, y detrás de la placa portafaros con bombilla halógena, se encuentra el tablero de instrumentos digital. Se parece al de la Pro pero prescinde de mucha información dejando tan solo la indicación de velocidad y el odómetro con parcial.
Con la excepción del botón de arranque eléctrico, el resto de los mandos se concentran junto a la empuñadura izquierda. Todo con buenos acabados, posicionados correctamente y que ofrecen buen tacto. Tan solo se echa de menos el gatillo de estárter en el manillar, ya que para activarlo habrá que buscar una palanquita integrada en el carburador. Su cerradura de contacto incorpora al final de su recorrido el interruptor de luces,Entre las vigas del chasis perimetral se encuentra también el mismo depósito de poco más de 6 litros de capacidad. No es mucho, pero dado el moderado consumo del motor habrá autonomía suficiente para no visitar con frecuencia la gasolinera. Eso sí, ya no es una moto de enduro sino una más civilizada trail que se va a mover más por núcleos urbanos y que se expone a que algún desaprensivo nos haga una mala pasada quedándose con el tapón. Convendría revisar este apartado dotándole con una cerradura, al menos ofreciéndolo como accesorio.
En lo que sí que se ha civilizado esta Marathon AC es en añadir una parrilla portabultos detrás del asiento que no contaba la Pro. La estructura cuenta con una plancha en la que se puede apoyar y fijar cualquier tipo de Top Case, y añade unas discretas asideras en sus laterales para maniobrar o para que se sujete el pasajero.
A bordo
El motor es el mismo que utiliza la Tango. Se trata de un Zongshen de cinco velocidades con culata de dos válvulas y refrigeración por aire forzado. El mismo, aunque en una generación posterior, al que emplea Derbi para impulsar sus Cross City y Senda Baja, rival directo de esta Marathon AC. No se declara potencia pero rondará los 10~11 caballos. La verdad es que nos dejó un buen sabor de boca en la Tango, y en esta Marathon, no llega a parecer el mismo ya que acusa algo más las vibraciones que afortunadamente no llegan a ser molestas. El escalonamiento del cambio de cinco velocidades resulta algo cerrado (marchas próximas entre sí) dando como resultado una primera larga y una quinta corta, por lo que no resulta recomendable tocar el desarrollo: un piñón de uno o dos dientes más permitiría rodar por carretera con cierto desahogo, pero a costa de perder aceleración, y viceversa. Es un motor duro que hay que rodarlo bien para que se suelte y se muestre alegre para subir de vueltas. Se queda a las puertas de los 100 km/h y, por cierto, el velocímetro indica un pelín de menos con respecto a la lectura de nuestro equipo de telemetría.
Dos detalles que no nos han gustado; que no tenga pedal de arranque para cuando le llegue la hora a la batería, y que la palanca de cambio no cuente con punta articulada, un detalle imprescindible para un modelo offroad.
La postura de conducción resulta muy natural con pies y manos apoyados en manillar y estriberas. El mullido del asiento no es de sofá de salón pero sí que resulta más blandito que el que monta la Pro. Eso sí, a la media hora de rodar, la gomaespuma cede y terminas tocando “hueso”.
Línea de tierra
Como ya se adelantó, otra de las diferencias de esta Marathon AC respecto de la Pro se encuentra en las suspensiones. En el tren delantero encontramos una horquilla de eje centrado con barras de 36 mm mientras que en el posterior el monoamortiguador se apoya directamente en un basculante de acero. No tienen la absorción y largo recorrido de la Marathon de mayor precio pero sí que te permiten salir de excursión por campo a ritmo ligero y sin llegar a mostrar falta de robustez.
Por frenos tampoco hay motivo de queja. En la Pro resultaba más que sobrados un disco delantero de 300 mm acompañado de un posterior de 200 mm, ambos con perímetro lobulado. En esta AC se opta por unos modestos 260 mm delante y también 200 mm detrás sin exquisiteces “wave”. Pese a su menor tamaño, hay potencia sobrada sobre todo para las prestaciones que desarrolla la mecánica de aire, y con un tacto muy dosificable sobre todo al emplear latiguillos con trenzado metálico que se inflan por sobrepresión.
En lo que respecta al calzado, Rieju vuelve a no escatimar empleando gomas T63 firmadas por Michelin. Ojo que no agarran sobre asfalto como un neumático de trail mixto, pero sí que se comportan muchísimo mejor que otras cubiertas de tacos, con el añadido de que en offroad, sobre todo en mojado, van pero que muy bien.
En compañía
El asiento es lo suficientemente largo para acoger sin demasiadas apreturas al conductor con su acompañante.
Los 5 cm de menos en altura permiten incorporarse sin ninguna dificultad al pasajero, disponiendo de las asideras laterales que incorpora la parrilla portabultos para agarrarse aunque con los brazos algo extendidos hacia atrás.
Las estriberas para apoyar los pies se despliegan con cierta dificultad por lo apretadas que están, encontrándose en una posición algo elevada.
Con lupa
El detallazo
Por tan solo 300 euros más, Rieju te ofrece la posibilidad de contar con un juego de ruedas, llantas y bujes para convertir en pocos minutos tu Marathon AC Enduro en Marathon AC SuperMotard o viceversa. Si ya es barata la Marathon AC, con este kit tienes dos motos por el precio de una. Imagínate: de lunes a viernes le calzas las llantas de aleación con neumáticos de asfalto en 17 pulgadas para ir al trabajo, y cuando llega el fin de semana te desmelenas con las ruedas de tacos para hacer con tus amigos una excursión campera. En el cambio deberás desmontar los discos y la corona trasera de unas ruedas para montarlos en las otras. El cambio es completamente legal ya que Rieju ha homologado este modelo con los dos tipos de ruedas.
Prestaciones con nuestro equipo de telemetría
Aceleración 0-50 m | 5,15 s (51,9 km/h) |
Aceleración 0-100 m | 8,18 s (65,6 km/h) |
Aceleración 0-400 m | 21,66 s (90,0 km/h) |
Aceleración 0-1.000 m | 44,84 s (94,2 km/h) |
Aceleración 0-100 km/h | NO LLEGA |
Velocidad máxima | 98,0 km/h |
Consumo | 3,98 l/100 km |
Autonomía | 158 km |
Peso total lleno | 109,1 kg |
Reparto tren delantero | 46,1% |
Reparto tren trasero | 53,9% |
Precio Bastidor Marathon Posibilidad conversión Enduro-SM |
Palanca cambio sin articular Estriberas sin goma desmontable Selector impreciso |
Ficha técnica/ Equipamiento/ Precio/ Galería Imágenes
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Ficha técnica/ Equipamiento/ Precio/ Galería Imágenes
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Rivales directos | AJP PR3 Enduro 125 AJP PR4 Enduro 125 Beta RE 125 Beta RR 125 Derbi Senda R 125 |
Hyosung RX 125 I-Moto Tigris 125 Keeway TX 125 Motorhispania Duna HR Enduro E 125 Yamaha XT 125 R |