• Autor del texto – Antonio Cuadra (enviado especial)
  • Fecha – 15/11/2011

  Aunque cueste creerlo, Honda sólo ha presentado este modelo como única representación en la cilindrada de 125. El Wave toma el relevo al anterior Innova, aunque ambos siguen fielmente el concepto de scooter de “rueda alta” con cambio de marchas que Honda presentó en 1958 con el Super Cab, y que resultó ser un gran éxito en los mercados asiáticos: más de 60 millones de unidades producidas desde entonces. Si el Innova se fabricaba en Tailandia, este Wave lo hace en China, compartiendo con el anterior muchos conceptos, como el motor semiautomático de cuatro velocidades (embrague automático) alimentado por inyección de 109,1 cc, o las llantas de 17 pulgadas.

Sobre esa base, cambia el diseño con líneas más afiladas y un nuevo faro que se integra con las luces de posición en el manillar. Como detalle característico de este Wave, con respecto al Innova, el hueco bajo el asiento de 7,4 litros de capacidad, que permite acoger en su interior un casco abierto. Pese a contar con un depósito de mínima capacidad (tan solo 3,7 litros), el nuevo Wave 110i hace gala de una gran autonomía conseguida gracias al bajo consumo del motor.

La óptica principal con bombilla halógena H4 en el manillar se confunde con los adosados laterales de las luces de posición. Fíjate que no hay maneta izquierda: el embrague es automático y el freno funciona por un pedal. En este tipo de scooters, derivados del mítico SuperCub, no hay plataforma para apoyar los pies, sino estriberas. Desde el lado izquierdo, se maneja el pedal de cambio de marchas con talonera en su parte posterior.
Dos caballetes: central y lateral. La rueda trasera es de mayor diámetro que nuestros ruedas altas (17 frente a 16 pulgadas) con basculante tipo moto (el motor no hace de basculante). El freno posterior es de tambor. No hay parrilla portabultos, pero sí una asidera tras el asiento para maniobrar el scooter y facilitar que se sujete el pasajero. Opcionalmente se sirve un baúl posterior con los anclajes necesarios.
El tablero se hace ver bien, aunque peca de información algo justa. Hay cinco testigos luminosos poco habituales de ver en un scooter: el de punto muerto (N) y el de las cuatro velocidades del cambio. Debajo del asiento, y por delante del depósito de gasolina, encontramos un hueco de casco más profundo que en el Innova anterior. Al menos se da cabida a un casco abierto.

 

Ficha técnica/ Equipamiento/ Precio/ Galería Imágenes


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