• Autor del texto – Antonio Cuadra (enviado especial)
• Fecha – 16/11/2011

  2012 es la fecha elegida por la marca austríaca de color naranja para comenzar a producir su primer vehículo offroad de propulsión eléctrica. Ya llevaba anunciándolo un par de años, y la verdad es que todos pensábamos en que se iba a tratar de una moto de enduro adaptada para circular por vías públicas, con su correspondiente alumbrado y perfectamente homologada. Pero no ha sido finalmente así, ya que la Freeride-e no contempla nada de esto.

A pesar de ello, la Freeride-e promete no defraudar, con un motor con potencia nominal de 10 CV y picos de 30 CV, alimentado por una batería de ión litio de 300 V y 2,1 kWh. Esta batería se puede extraer de su alojamiento, pero no para cargar en un domicilio sino para intercambiarla por otra unidad ya cargada y continuar con la diversión. El tiempo de carga al 100% de la batería es de 90 minutos partiendo de estado de descarga total. En cuanto al bastidor, combina una parte perimetral en acero junto con la pipa de la dirección, con otra parte central en fundición de aluminio y una posterior de plástico.

Levantando el asiento se accede a la batería de ión litio, permitiendo cambiarla por otra unidad cargada para “no parar”.	La rueda posterior apenas difiere de la de cualquier enduro de 125 cc: llanta de 18 pulgadas y freno trasero lobulado de 210 mm sobre basculante de aluminio.

El amortiguador trasero es un White Power anclado directamente al basculante. No hay pedal de freno: al ser eléctrico y automático se usa maneta de freno.	La única instrumentación se encuentra por delante del asiento, junto a la pipa de la dirección. A través de estos testigos se estima la autonomía restante.

Al no estar preparada para usar en vías públicas, la única piña de conmutadores disponible está junto al puño de gas y es este sencillo cortacorrientes con el botón “de arranque”, un mero formalismo de seguridad para iniciar la marcha.	Para el tren delantero se dispone de una horquilla invertida White Power con barras de 43 mm, que proporciona un recorrido de 250 mm. El disco es lobulado de 240 mm sobre llanta de 21 pulgadas.

El motor proporciona una potencia nominal de 10 CV, con picos de 30 CV, y un empuje bestial de 42 Nm. No hay cambio de marchas: acelerar y frenar.

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