• Autor del texto – Antonio Cuadra
• Autor de fotos – AC
• Autor acción – Javier Arenas
• Fecha – 9/7/2023

De siempre, la firma italiana SWM (Speedy Working Motors) se ha caracterizado por ofrecer motocicletas listas para participar con éxito en cualquier competición off-road sobre todo de enduro y los modelos derivados de esta especialidad como el MotoCross y Supermotard. Y esa misma filosofía la sigue aplicando en su etapa actual produciendo casi artesanalmente sus máquinas en la antigua factoría italiana de Varese, la misma en la que hace unos años BMW fabricaba las Husqvarna, y en la localidad que vio nacer a Cagiva (la última sílaba corresponde a Varese).

Cuando, en 2013, BMW vendió Husqvarna a KTM, Ampelio Macchi y Daxing Gong (propietario de la marca china Shineray) se asociaron para comprar a BMW las instalaciones y maquinaria con el fin de resucitar la mítica marca italiana.

Al principio de esta nueva etapa, SWM continuó la evolución de los modelos de origen Husqvarna y en el Salón EICMA de Milán de 2014 dieron a conocer una mecánica propia de 125 cc con nombre propio Bialbero con el que iban a extender su gama a la cilindrada de la convalidación y que actualmente impulsa a la naked deportiva Varez, las Neo-Retro Scrambler Outlaw y Ace of Spades, y la que nos ocupa, la supermotard SM 125 R derivada de la enduro RS 125 R que no se incluye en la gama española.

Y aunque la versión que traemos a Moto125.cc esté homologadas bajo Euro 5 y cuente con todos los requisitos para circular legalmente por la calle, la SM 125 R no deja de ser una auténtica moto de competición y, por ello, escasean los detalles prácticos que puedes encontrar en una moto de usar a diario. Fíjate por ejemplo en la cerradura de contacto con una llave muy simple y con la única funcionalidad del OFF/ON. El bloqueo de la dirección es independiente y se encuentra en la pipa de la dirección con el típico sistema “Clausor” de las motos de hace 30 años. Tampoco encontrarás un tapón del depósito de gasolina con cerradura y ¡ojo con el asiento! porque está preparado para un desmontaje rápido con una palomilla de cuarto de vuelta disponiendo de un tapizado muy especial anti deslizante: pura funcionalidad… racing.

El cuadro de instrumentos tiene un pase. Es nuevo en esta versión €5 basado en una pantalla LCD panorámica retroiluminada en azul que incluye lo mínimo imprescindible: velocímetro con grandes dígitos, cuentavueltas, cuentakilómetros total y parcial, ¡reloj horario! y seis testigos. No hay nivel de gasolina, pero sí aviso de reserva que, en realidad, es el tramo final intermitente de un nivel que no se utiliza, ni tampoco nivel de temperatura confiándose la situación límite a un testigo de sobrecalentamiento.

En cuanto al bastidor, comparte el mismo simple cuna desdoblado a la altura de la culata que el de su hermana mayor la SM 500 R que tampoco se incluye en la gama española de SWM. Es el mismo que utilizaban las anteriores Husqvarna con motor 4T grande caracterizado por emplear un tubo de acero de sección oval y placa protectora del cárter fijada entre los tubos de la doble cuna con basculante en aluminio al igual que el subchasis trasero desmontable. Lo primero que podrás pensar es que debe ser un chasis demasiado grande para un 125 cc, pero lo cierto es que su peso no se resiente (132,8 kilos medidos en nuestra báscula con el depósito de 7,5 litros lleno de gasolina) y damos por hecho una robustez más que sobrada.

Y aunque el bastidor sea grande lo cierto es que sus componentes se han distribuido aprovechando todos sus rincones: el vaso de expansión, por ejemplo, se encuentra detrás del lateral del escape bajo el cuerpo de mariposa, o el modulador de dos canales del ABS (novedad también en esta SM 125 R E5 en lugar del sistema combinado) en el lado derecho del motor junto al cilindro.

A destacar también, como ya hemos hecho en otras SWM de 125, la elección de suspensiones Fast Ace. La horquilla es invertida con barras de 41 mm y regulación en extensión a través de los tapones superiores, mientras que el amortiguador funciona con bieletas (progresividad variable, sistema Soft Damp de SWM) y cuenta con depósito de gas y regulación de precarga.

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A bordo

Ojito porque su asiento se eleva a 885 mm del suelo, algo típico de las SM Racing, y esto pone en apuros hasta las tallas estándar de metro setenta que tendrán que apoyarse de puntillas con los dos pies o con la planta de uno solo inclinando la moto a un lado. Y menos mal que es una moto muy estrecha de cintura y la suspensión cede ligeramente con el peso del piloto.

En cuanto te pones en marcha adoptas una postura erguida y natural con los pies sobre unas anchas estriberas dotadas de inserciones de goma y manos sobre un manillar ancho pero con el culo sobre un asiento duro como una piedra: un detalle más a sumar a las características racing de la SM 125 R. Si bien el tubo colector de escape está bien protegido de quemaduras por su lado izquierdo, se nota el calor en la pierna (aunque no te llegue a quemar).

Eso sí, si eres de los que te gusta entrar en las curvas cerradas derrapando y trazándolas en ángulo recto te lo vas a pasar en grande, porque el asiento te permite avanzar hasta casi el tapón (¡cómo agarra el tapizado!) descargar peso sobre el tren trasero y moverlo al delantero para controlar mejor la dirección apoyando a la vez el pie del interior de la curva. No llegamos a probar las versiones anteriores de la SM 125 R, pero con frenada combinada sería imposible practicar estas derrapadas, aunque en ocasiones el ABS trasero llega a saltar.

Un hecho muy común en las Supermotards es que comparten bastidor y suspensiones con sus hermanas de enduro pero al bajar el diámetro de la rueda delantera de 21 a 17 pulgadas se reduce el ángulo de lanzamiento y el avance de la dirección haciendo que su geometría sea más ágil de nuevo para entrar en curvas cerradas.

El extremo opuesto a esta situación lo encontramos al utilizar la SM 125 R en carretera abierta a alta velocidad, en la que se aprecia que empiezas a acariciar el límite de su estabilidad. En llano llegas a ver los 121 km/h en su velocímetro que equivalen a unos más que dignos 107,4 km/h reales que podrían llegar a ser más con un desarrollo más largo si no quieres emplear la SM 125 R para Supermotard.

No contamos con banco de potencia, pero podemos afirmar con total seguridad que el motor Bialbero Euro 5 da los 15 CV límite sin problemas. SWM ha trabajado mucho en su interior junto con Delphi que se ha ocupado de la gestión electrónica de la inyección, y ha conseguido un motor mucho más lleno en todos los regímenes que el Euro 4 que probamos en la Outlaw y Varez. Su zona útil comienza a las 7.000 revoluciones y puedes estirarlo incluso a más de 10.000 sin problemas, aunque ya decae mucho su potencia.

Si eres de los que quieres alternar el uso de la SM 125 R en los ratoneros circuitos de karts con los desplazamientos urbanos, la encontrarás que se mueve a gusto, pero sí deberías añadir un buen antirrobo articulado que bloquee la rueda trasera impidiendo también la apertura del asiento. Lástima que la Federación no organice una categoría Supermotard con motos 4T de 125 cc para pilotos novatos, porque con la SWM SM 125 R saldrías con ventaja.

Línea de tierra

En este apartado, la SWM SM 125 R se clasifica con un sobresaliente empezando por la acertada elección de la marca italiana en calzarla con unos neumáticos Michelin Pilot Street (antes montaban Kenda). Con ello te aseguras que cuentas con lo mejorcito para conseguir un excelente agarre tanto en seco como en mojado.

Las buenas notas se continúan con el sistema de frenos. Potencia no le falta: el sobredimensionado disco delantero de 300 mm mordido por una pinza flotante de doble pistón se complementa con uno de 220 mm con pinza flotante monopistón, todo ello con latiguillos de trenzado metálico y, novedad en esta E5, modulador ABS de doble canal independiente que apura bastante la situación de bloqueo delante y tampoco resulta demasiado intrusivo detrás.

Las suspensiones de Fast Ace ponen la guinda al conjunto con una horquilla invertida de eje avanzado con barras de 41 mm y 250 mm de recorrido, de tacto duro como corresponde a una moto con la R mayúscula en su denominación, aunque, por contrapartida, se pierda confort en un uso “civilizado”; buen detalle la regulación en extensión en los tapones superiores. Detrás se repite el recorrido de 250 mm con el monoamortiguador oleoneumático proporcionando un tacto inicial algo más blando para absorber las pequeñas irregularidades y que se va endureciendo conforme se comprime.

En compañía

Tratándose de una moto enfocada a la competición se agradece su buena disposición al acompañante. Por un lado, hay longitud de asiento sobrada para coger dos plazas disponiendo nuestro “paquete” de estriberas bien situadas y sendas varillas-asideras para agarrarse, aunque también sufrirá con la dureza del inexistente mullido del asiento. Eso sí, para competición, podrás desmontar sin ninguna dificultad las estriberas y asideras de los anclajes del subchasis.

El detallazo

Volvemos a destacar en una SWM el motor Bialbero de desarrollo propio. Se trata de una mecánica con todos los gadgets mecánicos que la convierten en una de las más punteras en la cilindrada de 125 cc: refrigeración líquida, culata con doble árbol de levas y cuatro válvulas, bomba de agua en culata, carrera ultracorta (58×47,2 mm), alta relación de compresión (12,8:1), inyección electrónica Delphi y cambio de seis velocidades, todo ello acompañado de un doble radiador con electroventilador en el del lado derecho. Pese a las limitaciones que impone la homologación Euro 5, SWM ha conseguido mantener el tope de los 15 CV en esta SM 125 R como también en el resto de los modelos 125 con ABS (las primeras versiones Euro 5 de Outlaw y Ace of Spades con frenada CBS registran 12,7 CV).

Con lupa

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El basculante contribuye a aligerar el peso de las SM 125 R al estar fabricado en aluminio. El desarrollo final es el adecuado para un uso Supermotard, e incluso te permite rodar rápido en autopista.	El silenciador va montado sobre el lado izquierdo de la moto y también contribuye a la ligereza al contar con un recubrimiento exterior de chapa de aluminio. La misma cubierta lateral de la carrocería lo protege ante posibles quemaduras.
Buenos detalles en una supermotard disponer de anchas estriberas con inserciones de goma extraíbles si quieres un mejor agarre del dentado exterior con las suelas de las botas. La palanca de cambio cuenta con punta articulada para las caídas.	Acabados de lujo en una simple pata de cabra: está fabricada en fundición de aluminio y es de las que no se recogen solas disponiendo de un interruptor cortacorrientes como elemento de protección.
Espectacular disco de freno delantero de 300 mm mordido por una pinza de doble pistón flotante con la intervención del canal delantero del modulador ABS, novedad en esta versión Euro 5.	Buen detalle en una moto racing disponer de estriberas para el pasajero dotadas de un generoso recubrimiento de goma que filtran las casi inexistentes vibraciones. Se pueden desmontar. Fíjate en lo que asoma de subchasis en color gris fabricado en aluminio.
El diseño y la funcionalidad se unen en estas asideras ligeras. No molestan a los movimientos del piloto, sirven para maniobrar la moto y que se sujete el pasajero, aunque, si lo prefieres, las puedes desmontar.	El motor de desarrollo propio SWM luce con orgullo la palabra italiana Bialbero en la tapa del alternador por el lado izquierdo. Hace referencia al doble árbol de levas en culata empleado en la distribución.
La SM 125 R hereda el doble radiador (a ambos lados del simple cuna) del modelo de 500 cc. Fíjate en lo sobredimensionado que está en altura. La culata lleva adosada la bomba de agua por el lado izquierdo.	Pese a sus características racing, la SM 125 R también se acoge a la tecnología LED en el faro. Los 4 LEDS de la franja superior hacen de luz de posición mientras que el foco derecho (izquierdo en la imagen) hace de cortas, y el izquierdo de largas con las cortas también iluminadas.
El tubo colector del escape incluye hasta 2 catalizadores embutidos en su interior: el primero en el tramo de bajada después de la sonda lambda y, el segundo, en el tramo que discurre por el lateral izquierdo. La placa protectora entre la doble cuna viene de las antiguas Husqvarna.	Este es el tramo horizontal del tubo colector que discurre por el lado izquierdo con sus correspondientes protecciones ante quemaduras. En la más alejada se apoya la pierna izquierda del piloto y se nota el calor.
La horquilla Fast Ace es invertida de eje adelantado con barras de 41 mm protegidas de los impactos proporcionando un recorrido de 250 mm y dotada de ajustes en extensión. Las llantas son de aleación (las mismas de la Varez en color negro) en 17 pulgadas.	Aunque su chasis viene de la versión de 500 cc, todos los elementos se han dispuesto alrededor del motor como se puede ver con el modulador ABS y el cánister que recoge los vapores de gases del aceite.
El sistema de bieletas que proporciona la progresividad variable al amortiguador tiene nombre propio en SWM: Soft Damp. Se encuentra muy recogido bajo la parte delantera del basculante de aluminio.	El amortiguador Fast Ace funciona con gas a presión (neumático) contenido en una botella adosada en su parte superior junto con aceite (hidráulico). Las dos tuercas circulares en color rojo hacen de tuerca-contratuerca para el ajuste de la precarga del muelle.
Justo en la parte posterior del motor por el lado derecho se encuentra el cánister que recoge los vapores de los aceites (también hidrocarburos como la gasolina) para reconducirlos a la caja de filtro del aire con el fin de completar su combustión.	Por el lado derecho del motor, junto al cilindro se encuentra el modulador del ABS de dos canales. Se conectan cuatro latiguillos: los de entrada y salida del freno delantero y lo mismo para el trasero. Es una de las principales novedades de esta versión E5.
El radiador derecho incluye el tapón de llenado y, poco más abajo, la conexión al vaso de expansión. Por el lado trasero se encuentra el electroventilador que no se ha incluido en el radiador izquierdo.	El freno trasero es más normalito basado en un disco de 220 mm y una pinza flotante de un solo pistón. En el interior del disco se aprecia la rueda fónica del sensor de velocidad trasero para el ABS.
El pedal de freno está hecho en fundición con extremo delantero atornillado para facilitar su sustitución en caída. La parte posterior del pedal se conecta a la compacta bomba de freno que incorpora el depósito de líquido de frenos con mirilla detrás.	El tapón del depósito de gasolina no incorpora cerradura ni bisagra y está fabricado en plástico como el propio depósito. El mismo tubo respiradero hace de unión para no perderlo en los repostajes.
Buen detalle el de incluir unos protectores de manos en los extremos del manillar para proteger no solo las manos sino las manetas.	La piña derecha incluye solo los mandos del cortacorrientes en color rojo y el botón de arranque. El acelerador es de salida lateral con cable de retorno.
Se ve bien a través de los espejos retrovisores. A penas sobresalen de los extremos del manillar e incluyen los correspondientes guardapolvos en los extremos del mástil.	Muy poblada la piña izquierda con la disposición del conmutador de intermitentes bajo el claxon. El botón rojo corresponde al conmutador largas/cortas, pero desconocemos la función del de su izquierda: ¿2 mapas de funcionamiento? Apenas se notan cambios en marcha.
Esta es la vista que tenemos desde el puesto de conducción. El manillar es de tubo sencillo en duraluminio sin conicidad variable.	El piloto trasero es también por LEDs junto con los intermitentes. La matriz de diodos luce con dos intensidades, más intensa cuando se acciona alguno de los frenos.
El asientose retira sin llaves ni herramientas mediante una palomilla de cuarto de vuelta dejando al descubierto la ECU firmada por Delphi, batería y un pequeño espacio para una dotación de herramientas y la documentación.	Todo se ha compactado al máximo, como podemos comprobar con el vaso de expansión situado entre el amortiguador y el cuerpo de mariposa. Fíjate en la sección oval de los tubos del bastidor.
El tapizado del asiento es muy antideslizante e incluye varias franjas transversales en colores negro, rojo y con el logo clásico de SWM. Detrás se encuentra el tornillo con palomilla para la apertura rápida del asiento.	El cuadro de instrumentos incorpora la información justa y necesaria con reloj horario. El cuentavueltas gráfico en horizontal alcanza las 12.000 revoluciones con segmentos de 500 rpm.
La cerradura de contacto solo tiene dos posiciones: OFF y ON. Se emplea una pequeña llave. Detalles muy de competición que te parecerán muy espartanos.	El bloqueo de la dirección es independiente y se encuentra en la pipa por el lado derecho como los antiguos “Clausor” de las décadas de los sesenta a los ochenta.
La horquilla Fast Ce cuenta con regulación en extensión del hidráulico a través de sendos tornillos en los tapones superiores. Algo poco habitual en una 125.	La bandera tricolor italiana se luce con orgullo en diferentes partes de la moto. En este caso la podemos ver en la placa portafaros.

Prestaciones con nuestro equipo de telemetría

Carácter Racing Componentes Premium y acabados Precio	Asiento duro Consumo elevado Cerradura de contacto

Ficha técnica/ Equipamiento/ Precio/ Galería Imágenes Ver FICHA TÉCNICA/EQUIPAMIENTO/PRECIO/IMÁGENES de la SWM SM 125 R E5