• Autor del texto – Antonio Cuadra (enviado especial)
  • Fecha – 08/11/2011

  No intentes clasificarlo porque es inútil. A la vista está en que se trata de una moto y no de un scooter, como nos tiene acostumbrados Kymco, pero no entra en ninguna categoría. Lo más parecido al K-Pipe es una naked de inspiración Ducati por su entramado multitubular que hace de chasis, aunque en la realidad es pura cosmética. Eso sí, muy bien conseguido.

En esa línea italiana, no desmerecen las formas del depósito y asiento, así como los grupos ópticos delantero y trasero, algo que Kymco cuida bastante en la última generación de modelos “abusando” de la iluminación por LEDs, no sólo para mejorar la visión de su conductor en bajas condiciones de luminosidad sino también para ser visto mejor y, por qué no decirlo, para aumentar el atractivo del vehículo.

En lo que respecta al motor de la nueva K-Pipe, Kymco emplea un monocilíndrico horizontal con caja de cambios de cuatro velocidades y embrague semiautomático: no existe la palanca de embrague, se cambia de marcha a “capón” y se inicia la marcha simplemente acelerando con la primera engranada, como si se tratase de un scooter automático. Este tipo de motores se emplea bastante en los “rueda alta” asiáticos; llevan mucho tiempo en el mercado y la factoría de China los produce como churros. Esta aclaración viene a cuento de que, empleando este propulsor, Kymco se asegura que el K-Pipe va a tener una robustez mecánica a toda prueba, con un consumo muy ajustado y que, al estar más que amortizado el motor, contará con un precio de adquisición muy contenido.

En definitiva, un nuevo concepto para épocas de crisis que puede funcionar muy bien sobre todo entre el público joven y con el aliciente de la fiabilidad ya contrastada de sus componentes.

 

Ficha técnica/ Equipamiento/ Precio/ Galería Imágenes


 Ver FICHA TÉCNICA/EQUIPAMIENTO/PRECIO/IMÁGENES de la Kymco K-Pipe 125

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